¿QUIÉNES ERAN LAS KISAENG?

Por: Alline Valadez

Las Kisaeng eran mujeres coreanas dedicadas al entretenimiento, eran artistas que trabajaban entreteniendo a reyes y personas de clase alta.

Eran el entretenimiento legal del gobierno, cuidadosamente entrenadas y frecuentemente introducidas en las bellas artes, como la poesía y prosa, en ocasiones sus talentos eran ignorados debido a su estatus social inferior. Debian tener conocimiento en costura y enfermería. Muchos nombres de Kisaeng han sido olvidados, algunos todavía se recuerdan, ya sea por su talento o lealtad. La más famosa de estas es la kisaeng del siglo XVI, Hwang Jin-i.

En los períodos Goryeo y Joseon, las kisaeng tuvieron el estatus de Cheonmin (la más baja de las castas de ciudadanos comunes en Corea durante el período dinástico). Ellas compartían este estatus con otras personas dedicadas al entretenimiento, como los esclavos. El estatus se heredaba, así que los hijos de kisaengs también eran Choemin, y las hijas se convertían en kisaengs. En el período Goryeo, el gobierno ordena mantener un registro de las kisaeng para mantenerlas vigiladas. La misma práctica se hacía con los esclavos. Las kisaeng sólo podían ser liberadas de su posición si pagaban un alta suma al gobierno; esto usualmente era realizado por un patrón rico, que solía ser un alto oficial del gobierno. En la jerarquía de Corea, las kisaeng eran técnicamente esclavas. Por esta razón, muchas veces se refiere a ellas como «poseen el cuerpo de la clase baja, pero la mente de una aristócrata». Ello implica que algunas kisaengs pudieron gozar de la mada de puesto alto, en algunos casos más elevado que el de mujeres nobles.

La carrera de la mayoría de las kisaeng era muy corta, generalmente iniciaban a la edad de 16 años y finalizaba a los 22, eran obligadas por ley, a retirarse a la edad de 50 años. A finales del período Joseon, la clase de kisaeng más alta eran las haengsu, quienes cantaban y bailaban en fiestas de la clase alta. A las kisaeng heangsu se les prohibía entretener después de cumplir los treinta años de edad. Muy pocas casas kisaeng tradicionales siguen operando en Corea del Sur, y se han perdido muchas de las tradiciones y danzas. Algunos empresarios de Corea del Sur llevan a sus socios extranjeros a una casa kisaeng, pero el lugar es solo una interpretación moderna o apenas un remedo de lo que era una verdadera casa kisaeng.

A comienzos del siglo XXI la sociedad coreana muestra un interés renovado por su pasado, el que se manifiesta en esfuerzos por redescubrir y mantener viva su herencia histórica y cultural. Estos esfuerzos están enfocados en la kisaeng del período Joseon y no en lo que queda de las kisaeng de hoy.